viernes, 31 de diciembre de 2010

Ensalada de judías verdes, zanahoria crujiente, virutas frías de foie y salsa dulce de mostaza

La base de la receta ya la tenía en mente como podéis ver en uno de los bocetos que había pensado hace unos días. (ver Boceto 2010_05)
Junto a los ingredientes de las judías verdes y las virutas de foie pensé que debía añadir otro ingrediente que aportarse algo de color al plato así como otra textura. Inicialmente pensé añadir unos tomatitos rojos darían alegría a la composición, pero los descarté porque no aportarían ninguna originalidad. La segunda opción fue incluir unas tiras de zanahoria crujiente. Si bien al freír las tiras de zanahoria pierden parte de su tono naranja, algo de color queda y además aportan un dulzor al plato que junto con el foie combina a la perfección. 

La preparación del plato empezó horas antes, mas bien fue el día antes, cuando introduje la lata de foie en el congelador para que endureciera y fuese más fácil trabajar con él y así sacar las virutas.

Pasadas unas cuantas horas (lo dejé toda la noche en el congelador), lo saqué y empecé a cortarlo con el corta-fiambre. Conforme iba obteniendo las lonchas se iban rompiendo solas y obtuve así mismo las virutas. Con cuidado las envolví en papel de plata y las dejé de nuevo en el congelador hasta el momento de emplatar.

El día de la cena, una hora antes, limpié las judías verdes y les quité las hebras y los extremos. Las corté en finas tiras y las reservé.  Con un pelapatatas se limpia las zanahorias y con el mismo pelapatatas fué obteniendo finas capas. También reservé hasta momentos antes.

La salsa la dejé preparada de antelación: miel al microondas unos 10 segundos y le añadimos un chorrito de vinagre , luego mayonesa y un toque de mostaza (para aquellos que se quejan de que a veces no doy medidas exactas y luego culpan de sus errores en la cocina: 1 cucharada de miel, 2 de vinagre, 3 de mayonesa y mostaza al gusto).

Momentos antes de la cena puse agua a hervir y la freidora a calentar el aceite. Las tiras de judías verdes unos 10 minutos en agua caliente (os aconsejo que no echéis todas de golpe sino en varias tandas) y las zanahorias en el aceite hasta que tengan un tono ligeramente marrón (cuidado que no se os quemen).

Luego emplaté colocando las tiras de judías verdes haciendo un círculo, en el interior la zanahoria crujiente y un poco de salsa alrededor del plato. Una vez servido así a los invitados, les añadí las virutas.


Falsas Habitas

Como ya he comentado en este blog, tras nuestra reciente visita a El Bulli, estoy dejándome influenciar por sus recetas y estoy intentando emular alguna de las que mas nos impactaron bien por su originalidad, bien por sus ingredientes.

Una de estas (ver Pistachos Tiernos) nos dejó muy sorprendidos y ha sido la primera que he intentado reproducir.

Puesto que la receta original de Adriá constaba de varias elaboraciones distintas me decanté primeramente por los pistachos tiernos y ver si podía conseguir que quedasen en textura como si fueran habas.

Empecé a trabajar con esta idea ya hace unas semanas y mi primer problema fue encontrar los pistachos crudos. Miré en supermercados, mercados, tiendas especializadas y sólo encontraba pistachos secos y tostados. Miré un par de veces en los Supermercados Hipercor que tienen una zona bastante amplia dedicada a frutos secos pero no tenía suerte, hasta que un día, volviendo a buscar en esa zona, por fin los encontré (no sé si habían estado ahí todo el tiempo, o es que no los había visto). La cuestión es que ya los tenía en mi mano y finalmente podía atacar la receta. Ver producto.

Cuando se dicen que son crudos no quiere indicar que se presenten tiernos, quiere decir que en su embasado no han sufrido un proceso de secado artificial, pero son como las lentejas o los garbanzos, que necesitan una hidratación previa.

Como no encontré ninguna referencia a su elaboración en cuestión de tiempos ni de hidratación ni de cocción, decidí hacer varias pruebas a ver cuál era la más adecuada.

Ocurría también que los pistachos vienen con una telita que los envuelve, similar a la que presentan las castañas cuando se les quita su corteza. Así que esto iba a suponer tener que descubrir cómo poder quitársela durante su elaboración.

Lo primero y más rápido que hice fue introducirlos directamente, sin pasar previamente por la hidratación, en una olla Express. Los limpié primero, claro está y los dejé cociendo 10 minutos. El resultado en cuanto a la textura fue el correcto: los pistachos se habían ablandado perfectamente y al masticarlos estaban tiernos y con un sabor muy suave. Pero desgraciadamente no todos estaban enteros, algunos aparecían partidos y los que quedaban enteros aún tenían la telita a su alrededor. Tras un rato largo limpiándolos finalmente conseguí tener una buena cantidad de pistachos cocidos y listos. Sólo quedó rehogarlos con beicon y servirlos.

Seguidamente realicé otro procedimiento a ver si así conseguía quitar mas fácilmente el recubrimiento. Probé a dejarlos en agua un tiempo e ir controlando de vez en cuando a ver si era posible ir quitándolo. Pero por mas que lo intentaba ni a la media hora, ni a la hora, ni a las dos horas… ni a las 4 horas de estar en remojo se desprendía de su envoltorio y lo que conseguía es que también se fuesen separando por la mitad. Así que este método no conseguía mejores resultados sino que venía a ser mas lento que el anterior.

Con estas pruebas ya tenía claro los tiempos que necesitaba para realizar esta elaboración para la cena de Navidad, teniendo a demás en cuenta que la cocción se puede llevar a cabo con antelación y luego sólo necesitarían pasarlos por la sartén junto con el beicon justo antes de servirlos.

Así que 3 horas antes de la cena cocí los pistachos y los reservé. Luego pedí ayuda a mi mujer para que uno a uno, les fuese quitando la piel protectora. Cosa que apenas le llevó una hora para unos 350 gr. de pistachos.

Corté 8 tiras de beicon en finos trozos y los freí para añadir posteriormente los pistachos junto antes de servir.


Los presenté como falsas habitas con lo que los comensales enseguida se empezaron a preguntar qué serian realmente. Varias opciones fueron comentadas hasta que al final alguien dio con la solución.

Finalmente causó gran sorpresa y cabe decir que a todos encantó la propuesta, preguntando, claro está, por lo novedosos de su elaboración.


martes, 21 de diciembre de 2010

Bocetos Navidad 2010: Receta 2010_06

No me acuerdo cómo vino esta receta. Supongo que revisando alguna otra, pero la idea es tener otra posibilidad de entrante.

En principio iba a ser una crema de queso sobre cebolla caramelizada y una base de pasta sableé. Pero mirando otras elaboraciones se me ocurrió que, aunque tengo un sifón ISI que me regaló mi mujer, hace tiempo que no lo uso y esta sería una buena ocasión, así que podría cambiar la crema por una espuma.

En cuanto a los ingredientes, para el queso podría ser una espuma de queso fresco, o, para darle un poco más de sabor, ya que el fresco puede quedar un poco soso, podría optar por la opción de la Mozzarella. O con mas fuerza decantarme por una espuma de parmesano.

La cebolla caramelizada no tiene mayor secreto: cebolla morada, que tiene un punto de dulzor que no tiene la blanca, que pochamos lentamente y la final podemos añadir una cucharada de azúcar de caña para incrementar el dulzor.

En cuanto a la masa sablée, hay la opción de hacerla o comprarla. Como ya he comentado en otro post, preferiría hacerla, pero a falta de tiempo… ya veremos


 

Bocetos Navidad 2010: Receta 2010_05

No sé cuando vi un plato con tiras de tiras judías verdes cocidas pero me pareció muy original. Si, ya sé que unas judías verdes no tienen nada de original pero el verlas cortadas en finas tiras le daba cierta gracia. Así que esta vez estaba dispuesto a añadirlas a una receta para estas fiestas. El tema estaba ahora en saber cómo presentarlas y que no pareciese un plato simplón.

Hace unos días pusieron un documental en La2 en el que Adriá hablaba sobre cómo descubrieron un ingrediente por pura casualidad: la grasa de foie. Resulta que en los envases en lo que sus proveedores les proporcionaban el foie se dieron cuenta del poso que se quedaba y que no era ni mas ni menos que la grasa de foie que supuraba el block de foie y cuyo ingrediente principal resultaba ser un aceite aromatizado al foie.

Con lo que le gusta el foie a mi mujer, y como siempre tenemos foie en la nevera, se me ocurrió ver si sería posible usar aceite de foie para aliñar las tiras de judías verdes. Pero siendo realistas, para una mesa de unos 12 que seremos creo que el presupuesto no va a llegar. Esto me obliga a dar un giro de vuelta a la receta y, sin salirme del maridaje de las judías con el foie, se me ocurre añadir unas virutas de foie en lugar del aceite.



 
Teniendo en cuenta lo complicado que es trabajar con el foie a temperatura ambiente, ya que apenas sirve para ser untado, creo que me va a facilitar la vida, además de crear un gracioso contraste, congelarlo y luego cortar unas virutas para servirlas con las judías.

El plato así sólo se me antoja que aún está muy soso y debería añadir algo mas para acompañarlo. Seguiremos pensando.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Bocetos Navidad 2010: Receta 2010_04

Ya hace tiempo que el mundo de la restauración ha asumido que los helados no son sólo elaboraciones para postres. He igualmente ya está mas que asentado el hecho de que han transcendido el mundo de lo salado.

Supongo que la mayoría de nosotros estamos acostumbrados a los helados dulces, pero una de las grandes sensaciones en el paladar es descubrir una esencia salada en la textura del helado además de la sorpresa que se experimenta cuando lo encontramos como acompañamiento fuera de los postres.

El principal problema para seleccionar un helado en el menú navideño es su elaboración. Para conseguir un helado cremoso hay que estar batiendo continuamente la mezcla para que se vaya enfriando homogéneamente. Si intentamos hacer un helado en casa únicamente introduciendo la mezcla en el congelador, conseguiremos que se formen cristales de hielo y que su aspecto no sea el deseado. Deberíamos estar continuamente batiendo para romper estos cristales conforme se enfría y esto, claro está, puede ser un poco engorroso.

Pero los retos están para enfrentarse a ellos así que este año estoy dispuesto a intentarlo y mi táctica en este caso va a ser, una vez seleccionada la mezcla, introducirla en el congelador y cada cierto tiempo, supongo que tendré que ir revisando cada 30-60 min., sacarla, introducirla en la Thermomix batirla bien. Así hasta obtener la textura buscada.

Bien, la elaboración está clara, pero ¿qué hay del sabor?, ¿qué ingrediente elegir?. Helado de curry, helado de besamel con nuez moscada, helado de …. Bien, aún tengo tiempo pero creo que por ahora está ganando posiciones el helado de azafrán, lo encuentro muy original además de lo interesante de conseguir tener el sabor limpio del azafrán que siempre se usa como especia pero nunca como sabor único en un plato.

Para acompañarlo y así darle mas entidad a la receta se me ha ocurrido añadir un crujiente de plátano: finas rodajas de plátano introducidas en el horno hasta que quedan crujientes.



La idea es presentar esta elaboración en cucharas de porcelana con la medida justa para que se puedan tomar de un solo bocado.

Bocetos Navidad 2010: Receta 2010_03

Si bien me encantaría que la cena de navidad fuese una sucesión de pequeñas creaciones cual menú degustación de ElBulli, desgraciadamente ni mi cocina me permite semejante despliegue, ni tengo un equipo humano tras de mi que me pueda ayudar, ni, lo que mas peso tiene a la hora de descartar semejante posibilidad, mi mujer me permitiría estar todo el tiempo en la cocina para poder sacar una imparable sucesión de platos a la meas. Así que cada navidad tengo que buscar un plato con cierta “presencia” que sea el que se pueda considerar como plato principal.

Siempre mi tendencia es elegir carne, o aves, como materia fundamental. Rara vez selecciono pescado y principalmente porque es mas fácil congregar gustos en torno a la carne que entorno a el pescado. Y en cuanto a qué carne elegir busco aquel tipo o corte, que se salga de lo normal y que no suela presentarse en las recetas que preparo el resto del año.

El problema principal con las recetas de carne es que es limitado el juego de su creatividad. Ya Ferran Adriá lo descubrió hace años y al carne ya no aparece en sus recetas: “Cuando hablamos de carne …., aparte de modificar los sistemas de cocción, pensamos que es muy difícil romper la estructura canónica de producto-guarnición-plato, lo cual significa que para nosotros, limitarse a modificaciones superficiales en alguno de estos elementos no representa una auténtica evolución.” (espero que esta cita no me traiga problemas de copyright…). Es decir, leyendo entre línas, que en este tipo de platos sólo hay tres elementos a considerar con los que se puede tener algo de originalidad: el tipo y corte de la carne, su acompañamiento y la presentación.

En esta receta he elegido un corte de solomillo de buey y con inspiración de otra receta de Adriá se presentará rebozado en una salsa melosa de pesto (cuando digo melosa quiero indicar que ha de tener una contundencia suficiente como para que parezca como un rebozado).

En el tema de guarnición, intentando obviar las tan manidas patatas fritas, me decanto por un acompañamiento de verduras pero dando el juego de elegir una verdura que no suela ser normal como acompañamiento de carnes y presentarla en una elaboración fuera de lo normal: Chips de Coliflor (con la cortafiambres intentaré hacer rodajas finas de coliflor que blanquearé en agua hirviendo y luego al fuego fuerte para freírlas).

En principio así iba a quedar el boceto, pero revisando mas recetas he vuelto a encontrarme con una elaboración que me gusta y que siempre se me resiste: patatas soufflé. Vamos a ver si este año me salen bien y con un poco de suerte las puedo añadir a este plato. Nota: Un poco de canela las daría un toque diferente.



Dudas a investigar: ¿Rebozar el solomillo en pesto una vez pasado por la sartén, o rebozarlo previamente y luego introducirlo en la sartén?

viernes, 17 de diciembre de 2010

Bocetos Navidad 2010: Receta 2010_02

Revisando uno de los libros de Adría aparece “canapé de salmonete sobre puré de trufa blanca y patata confitada”.


La verdad es que hace tiempo que quiero hacer alguna receta de salmonetes y la idea de usar un ingrediente tan común en un canapé de navidad me atrae. El truco como en toda buena relación, está en la compañía. Adriá busca la exquisitez y exclusividad de la trufa blanca. Yo podría acercarme a alguna tienda especializada y hacerme con algo de trufa blanca, pero teniendo en cuenta que seguramente para la cena de nochebuena seamos 12 comensales, se me antoja que la cantidad de puré que tengo que hacer puede ser prohibitiva para mi bolsillo. Así que dejo la receta en suspenso hasta la decisión final y en caso de ser elegida dedicaré un rato a buscar una opción adecuada para hacer un puré que acompañe a los salmonetes.

Bocetos Navidad 2010: Receta 2010_01

No puedo evitarlo, pero para las propuestas que se me van ocurriendo para el menú de Navidad estoy totalmente influenciado por nuestra visita a El Bulli (ver la crónica en LaGacetaDelComensal ) y se me van ocurriendo creaciones con claros detalles de alguna de las recetas que allí probamos.

Como el primer paso para cualquier cura de desintoxicación es reconocer que se tiene un problema, voy a aplicarme el primer paso: ¡ estoy enganchado a ElBulli !...pero lo peor de todo: ¡ no quiero curarme ! Así que asumiendo este problema me dedico plenamente a idear y buscar recetas de nochebuena como homenaje a Adriá. Y para ello voy a revisar sus libros y ver qué ideas se me van ocurriendo.

Este año, en lugar de incluir todas las recetas en un post y poner una breve descripción de cómo quedarían, voy a hacer caso a una persona muy querida, y voy a intentar explayarme un poco mas en cada una de ellas explicando lo que pueda de lo que me llevan a crearlas y cómo creo que podría ser su elaboración.

Tampoco quiero ponerlas nombre ya que no quedarían finalmente identificadas hasta que las elaborase, momento en el cual ellas mismas se darían el nombre apropiado, así que por ahora sólo tendrán un número. Sólo las finalmente elegidas tendrán un nombre.

Sin mas preámbulos procedo con la primera.

Mi intención con esta es ocultar a la vista el ingrediente principal del plato. Si bien en el Bulli añadían el juego de las formas en los platos, dando formas que sugerían un ingrediente pero que finalmente se revelaban totalmente diferente, mi limitación en cuanto a tiempo y materiales me hacen decantarme por una envoltura mas clásica.

Hay varias opciones para este fin: estaría el hojaldre, o la pasta brise, pero cuando uso algún ingrediente que tengo que comprar precocinado, como estas opciones, me parece que no estoy siendo honesto como cocinero y que debería elaborar yo mismo todo lo necesario. Así que, con esta idea punzándome mi parte ética de cocinero, me decanto por usar pasta para hacer un saquito a modo de ravioli y así desempolvar la máquina de hacer pasta que está guardada en el trastero.


Bien, ahora quedaría elegir el ingrediente principal que irá dentro del saquito de pasta. Quiero huir de los ingredientes comunes para que no parezca un ravioli de los que se pueden comprar en cualquier tienda: nada de carne, nada de salmón, ni de espinacas, ni de queso… ¿porqué no langostinos?. Si ya sé que no habría gran explosión de sabor ni sería una gran sorpresa para el comensal encontrárselo en su interior, pero el langostino es un ingrediente que no ha de faltar en las cenad de navidad y siempre puedo jugar con la salsa para darle rotundidad al plato. Además puedo acompañar el langostino en el interior del ravioli con alguna salsa fuerte de hierbas…

Hay que seguir dando vueltas a esta receta si es que al final es una de las elegidas.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Churros

Estamos ya en Diciembre y el tiempo, como no puede de ser de otra manera, está siendo lo suficiente desapetecible como para limitar las actividades que se pueden llevar a cabo con los crios.

Tras un día entero con ellos metidos en casa hay que ir buscando continuamente maneras de tenerlos entretenidos entre las cuatro paredes y ya a la hora de la merienda se nos acaban las ideas, así que llevarles a la cocina a que se enharinen conmigo es la última bala de la recámara que siempre me guardo. Además en esta ocasión los primos iban a venir a jugar con ellos y así preparábamos merienda para toda la familia.

La primera opción fue cocinar un bizcocho, pero uno de esos sutiles comentarios de mi mujer sobre sus preferencias, “a mi no me hace mucha gracia los bizcochos… para merendar prefiero los churros…”, hizo cambiar inmediatamente la receta.

Cerca de nuestra casa hay una de esas cafeterías, que también son churrerías, donde puedes encontrarlos recién hechos a cualquier hora del día, con lo que siempre que hemos tenido antojos de ellos hemos podido comprarlos en un periquete. Pero en este caso, con lo desagradable de la temperatura de la calle, reconozco que en ningún momento me plantee salir a la calle a comprarlos, así que me puse a buscar rápidamente una receta de churros en los libros de cocina.

Creía que su elaboración iba a conllevar más dificultad, o cuando menos una lista medianamente grande de ingredientes, pero tras consultar varios libros, y alguna receta en Internet, me di cuenta que con sólo dos ingredientes sería lo mas fácil del mundo.

Los ingredientes principales son la harina y el agua (o también leche según alguna receta). Con un poquito de sal y el aceite para freír completamos la lista.

En cuanto a las cantidades, varias recetas indican diferentes cantidades, pero yo me quedo con una que es fácil de recordar: misma cantidad de harina que de líquidos (agua mas leche o sólo agua). Así que en mi medidor he echado harina hasta la marca de ¼ de litro, he reservado, y luego he juntado agua y leche (dicen que hay que poner mas cantidad de agua que de leche) hasta la misma marca de ¼ de litro.

Para su elaboración vertimos los líquidos en un cazo y los llevamos a ebullición, momento en el cual se retira el cazo del fuego y se añade la harina. Se remueve bien hasta que no queden grumos y la masa resultante no se pegue a las pareces. Dejamos que pierda un poco el calor para que podamos manejar la masa.

Ahora llegaría el momento de introducir la masa en la manga pastelera, con la boquilla adecuada, para darle la forma adecuada a la masa.

Como no tenía planeado hacer churros, no había realizado la labor básica inicial de asegurar que tenía todas las herramientas adecuadas y además en perfecto estado.

Tengo tres herramientas susceptibles de ser usadas para esta acción: dos mangas pasteleras y una pistola decoradora de pasteles.
Una de las mangas pasteleras era demasiado pequeña para usarla (la suelo utilizar para hacer pequeñas decoraciones en los pasteles), pero la otra era de un tamaño adecuado y con una selección de boquillas que me permitiría darles varias formas a los churros. Así que todo estaba controlado: me he puesto a introducir la masa dentro de la manga pastelera, he seleccionado una de las boquillas adecuadas y he empezado a presionar para hacer que la masa saliese por la boquilla. Y justo en ese momento me de dado cuenta que la última vez que la usé la hice un pequeñito agujero que se me estaba agrandando conforme presionaba la masa y se iba saliendo por ahí en lugar de la boquilla. Nada, un ligero contratiempo que sólo implicaba sacar la masa introducida y meterla en la pistola decoradora. Pero ya su nombre me ha debido indicar que no era la herramienta mas adecuada para este tipo de tareas. La masa de churros en ningún momento es parecida a la textura de las que se usan para decoración, es mas compacta, y en cuanto me he puesto a presionar el émbolo para hacer los churros, la boquilla ha saltado de su sitio y ha creado un momento pánico que ha significado tener que agarrar la boquilla con una mano y el embolo con otra. Finalmente he conseguido ir haciendo los churros mientras tenía las dos manos evitando que la masa saliese por otro sitio que no fuese la boquilla.

Con el aceite bien caliente vamos echando la masa en pequeñas tiras de masa. Que conste que he intentado darle forma de los clásicos churros, pero teniendo las dos manos ocupadas, ha sido imposible así que los he dejado con la forma de tiras de churro.

Vamos haciendo en pocas tandas para que el aceite no se nos enfríe y cuando están bien dorados los retiramos y los ponemos en una bandeja con papel para que absorba el exceso de aceite.
Una vez que se enfríen podemos espolvorearlos con azúcar. Yo tenía a mano azúcar glass de una receta anterior y lo he aprovechado para esta ocasión.


La verdad es que han salido deliciosos y los críos se han abalanzado sobre ellos y apenas han dejado para que los adultos los probásemos.

Me parece que a partir de ahora vamos a visitar mucho menos la churrería.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Magdalenas

Hoy una receta de magdalenas que finalmente salió bien.
Hace unos días, junto a mis críos, nos pusimos manos a la masa para hacer nuestras primeras magdalenas. Puesto que era la primera vez elegí una receta de un libro y la seguimos al pie de la letra con la confianza de 
que saldrían igualitas a las de la foto que se incluía en el libro.

El olor que desprendían en el horno era delicioso y hacían creer que una vez frías estarían riquísimas. Nada mas lejos de la realidad: estaban duras como la piedra. Aún no sé dónde estaba el fallo, pero analizando la receta, lo único que hacía entrever algo extraño era la ausencia de levadura. Seguro que hay varias recetas de magdalenas sin levadura pero me propuse, para la siguiente intentona, añadir levadura para ir sobre seguro. Y así fué, esta es la receta de las magdalenas que nos estamos comiendo esta semana.
 
 
Ingredientes

200 gr. de Harina
200 gr. de Mantequilla
150 gr de azúcar glas
50 gr. de azúcar avainillado
4 huevos
1 sobre de levadura
Sal

 
 
 
Preparación:

Batimos los huevos junto al azúcar. Derretimos la mantequilla en el microondas y lo juntamos batiendo nuevamente. Tamizamos la harina junto a la levadura y lo juntamos todo. Mezclamos todo asegurándonos que no dejamos ningún grumo.
Vertimos la masa en moldes para magdalenas llenándolos sólo hasta la mitad, espolvoreamos un poco de azúcar normal y las metemos en el horno, previamente calentado, a 180º entre 15-20 minutos. 
Cuando las saquemos las dejaremos enfriar.

P.D.: Mis hijos están cortando por la mitad las magdalenas y rellenándolas de nocilla…


lunes, 1 de noviembre de 2010

Porrusalda con Bacalao


 
Ingredientes:

2 puerros
500gr de Bacalao desalado
2 zanahorias
4 patatas grandes
Pastilla de caldo de pescado
Agua
Aceite
Sal





Preparación:
Para esta receta fui a la pescadería con la intención de comprar Bacalao fresco y realizar el proceso de desalado en casa (metiéndolo en agua fría durante unos dos días y cambiando el agua tres veces), pero al llegar a la pescadería de mi supermercado sólo tenían bacalao embasado, ya cortado y desalado. Reconozco que no me suele gustar comprar el pescado fresco ya embasado y menos, como era en este caso, que no era un embasado de la propia tienda, sino que venía con etiqueta comercial. Como no me apetecía tener que pensar en una alternativa a la receta ya elegida opté por vencer mi reticencia me llevé para casa el bacalao ya desalado. Como no tenía que esperar un par de días para desalarlo pude adelantar su preparación y la hice al día siguiente.

Para su realización se limpian los puerros y la zanahoria y se cortan en pequeños trozos. Las patatas las pelamos y las rompemos en trozos medianos (cuando digo romper las patatas me refiero a no cortarlas enteras con un cuchillo, sino rasgarlas para que suelten algo de almidón).
En una cazuela con un chorrito de aceite cocinamos ligeramente los puerros y la zanahoria sin que se tuesten. Añadimos las patatas y seguimos cocinando unos 15 minutos sin para de remover para que no que quemen. Incorporamos la pastilla de caldo y el agua hasta cubrir todo (si tenemos caldo de pescado mejor) y cocemos durante 25 minutos. Un par de minutos antes de que la patata esté en su punto, añadimos el bacalao y continuamos cocinado hasta que esté en su punto. Probamos y rectificamos de sal si es necesario (ojo que el bacalao ya aporta su nivel de sal y podríamos pasarnos si no tenemos cuidado). Servimos


Nota: En este caso acompañamos el plato con un BACH Extrisimo semi-dulce 2009.

sábado, 23 de octubre de 2010

Guiso de Ternera con panceta y guisantes


Ingredientes

Medio kilogramo de ternera de 1ª
Una lata de guisantes
Dos cebolletas
2 zanahorias
Un vaso de vino tinto
Dos tomates
Dos dientes de ajo
Dos pimientos chorizeros
Dos tiras de panceta


Preparacion

Cortamos las zanahorias y las cebollas y las dejamos hacer a fuego lento junto con el ajo. Salpimentamos la carne y la doramos en un cazo a parte. Reservamos la carne y en el mismo cazo freímos la panceta cortada en tiras. Cuando las verduras estén hechas les añadimos la carne de los pimientos chorizeros y el vaso de vino. Dejamos que reduzca y vertimos todo en el cazo junto a la carne y la panceta. Añadimos los tomates pelados y dejamos cocer durante unos 45 minutos. Si vemos que nos vamos quedando sin salsa vamos incorporando agua. Al final de la cocción rectificamos de sal, añadimos la lata de guisantes y servimos.

viernes, 15 de octubre de 2010

Crepes

Esta es la primera receta que recuerdo haber aprendido ya desde niño. Debería yo tener unas pocas decenas de años y, tras verla hacer verano tras verano a mi tía en Suiza, llegué a aprendérmela y a “importarla” para hacerla en casa.

Mi tía nos las hacia a mi hermano, a mi primo y a mi para desayunar en los veranos y las navidades que pasábamos con ellos y al cabo de tantos años llegué a aprendérmela y a poder hacerlas por mí mismo en casa.

Es una receta sencilla, de ahí porqué me la aprendí cuando era un renacuajo, y da mucho juego pudiendo ser la base tanto para platos dulces como salados.


Ingredientes
3 huevos
100gr de harina
20gre de azúcar
Un vaso de leche
Aceite



Preparación

Batimos los huevos e incorporamos lentamente la harina sin parar de batir para que no haya ningún grumo. Añadimos la lehce y el azúcar, removiéndolo todo hasta que la mecla sea homogénea.

Ponemos una sartén mediana al fuego, con una cucharadita de aceite, y cuando el aceite humee vertimos un cazo de la mezcla y hacemos movimientos circulares en la sartén para que se reparta bien por la sartén. Al cabo de medio minuto damos la vuelta a la crepe y la hacemos por el otro lado.

Hasta aquí la preparación de la crepe, luego lo que pongamos dentro ya será a gusto de cada uno y la variedad que admite es enorme. En mi casa, como suelo hacerlas para el desayuno, las rellenamos con Nestquik como puede verse en la foto. 

Tambien suelo hacer una tarta de crepes con mousse de fresa, pero esa receta para otro día...

miércoles, 13 de octubre de 2010

Pollo en pepitoria

Ingredientes
500gr de pollo troceado
6 Chalotas
4 dientes de ajo
3 huevos
1 vaso de vino blanco
Azafrán
1 cucharada de harina
Sal


Preparación

En una olla a fuego fuerte, con un chorrito de aceite, doramos los trozos de pollo. Vertemos el vino y dejamos que reduzca, incorporamos agua hasta cubrirlo todo. Sazonamos a gusto y dejamos cocer unos 45 minutos.

Cocemos los huevos y retiramos las yemas. Las desmenuzamos junto a un cazo de caldo de la cocción. Troceamos el resto del huevo y reservamos.

En una sartén con un poco de aceite cocinamos las chalotas y los ajos a fuego suave. Cuando estén hechas añadimos la harina y la tostamos un poco, incorporamos el azafrán y antes de quemarlo añadimos el tazón de caldo con las yemas. Una vez bien mezclado todo añadimos a la cazuela del pollo junto al resto del huevo. Dejamos cocinando todo un rato hasta que esté todo bien ligado.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Costillas con salsa barbacoa

Ingredientes:
1 cebolla
3 dientes de ajo
1 lata de tomate entero pelado
3 cucharadas de azúcar moreno
1 vaso de vinagre
3 cucharaditas de sal
3 tomates secos
3 pimientos secos
1 costillar de cerdo

Preparación:

Cortamos la cebolla y la sofreimos junto a los ajos. Añadimos los tomates secos y los pimiento secos troceados y dejamos que se mezcle todo bien. Vertimos el vinagre y dejamos que reduzca un poco, y a continuación incorporamos el azúcar y la sal. Cuando se hayan disuelto bien es el turno de los tomates eneros pelados. Dejamos cocer un rato hasta que quede algo espeso y pasamos por una batidora dejándolo a nuestro gusto.
Con un pincel embadurnamos bien las costillas con la salsa, envolvemos en papel de plata e introducemos en el horno a 150º durante dos horas. Al cabo de ese tiempo sacamos del envoltorio y las dejamos unos minutos en el horno con el grill para que cojan el color tostado.

Nota: Los tomates entero pelado los podemos sustituir directamente por salsa de tomate. Yo elegí costillas de cerdo, pero sirve igualmente con costillas de ternera.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Pollo a la salsa de limón con calabacín

Ingredientes
3 pechugas de pollo.
1 calabacín.
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
250gr de Nata líquida.
1/8 l. de Vino blanco.
El zumo de medio limón.
1 pastilla de caldo de ave.
1 hoja de laurel.
Aceite.
Perejil.
Sal y pimienta.

Preparación:

Cortamos la cebolla en dados y fileteamos los ajos. Lo echamos en una sartén a fuego lento con un chorrito de aceite. Cuando esté pochada la cebolla reservamos (cuidado de que los ajos no se nos quemen).

Limpiamos el calabacín y lo cortamos en dados. A fuego fuerte les damos color y cuando esté listo, bajamos el fuego y añadimos el pollo cortado en tiras. Tras unos minutos sofriendo el pollo añadimos la cebolla y el ajo. A continuación la nata, el vino, el zumo de limón, la pastilla de caldo y la hoja de laurel. Dejamos cociendo a fuego lento unos 25 minutos hasta que la salsa se reduzca. Por último probamos y salpimentamos a gusto y añadimos el perejil picado.

Como acompañamiento unas patatas fritas o arroz blanco.

domingo, 5 de septiembre de 2010

Arroz con conejo y calabacín

Ingredientes para 4 personas:

250gr de arroz
250gr de conejo
1 calabación
Media cebolla
1 Pimiento rojo
1 diente de ajo
2 tomates
Aceite
Sal
Azafrán
3 vasos de caldo

Preparación:

En una sartén con aceite a fuego medio se introducen los trozos de conejo y cuando se hayan dorado se retiran. Se limpia el calabacín, se corta en dado y lo freímos en la misma sartén. Mientras en la paellera preparamos el sofrito de cebolla, pimiento rojo y el ajo, cortado en láminas. Cuando los ingredientes estén pochados añadimos los tomates rallados. Tras unos minutos añadimos el conejo y el calabacín, se rectifica de sal y añadimos el azafrán. Por último añadimos el arroz, el caldo (o su equivalente de agua con una pastilla de concentrado)  y se deja unos 25 minutos hasta que esté listo.

domingo, 25 de julio de 2010

Calabacines rellenos de carne, plátano crujiente y aceite de Albahaca

Hace tiempo que no actualizo este blog. El trabajo, el estrés, la familia y el buen tiempo para bajar a la piscina, han propiciado que el tiempo libre que suelo dedicar a plasmar las recetas en este blog se haya visto reducido. Evidentemente no he dejado de cocinar ni un solo día, pero también he de reconocer que últimamente me he concentrado mas en recetas poco originales/creativas y he tirado mucho de mi recetario básico.

Alguna es digna de llevarla a esta blog y la dejaré en el tintero en busca de un hueco para darla las correctas palabras que la lleven a la vida en este medio.

Para la receta de hoy vamos a necesitar: 150 gr de carne picada (yo selecciono ternera, pero la elección es vuestra), dos cebolletas, dos dientes de ajo, medio dl de aceite de oliva, 4 hojas de albahaca, un plátano, sal y pimienta.

Picamos finamente las cebolletas y las pochamos lentamente. Añadimos la carne picada, los ajos picados y salpimentamos. Cuando esté hecho reservamos.

Limpiamos el calabacín, le quitamos la piel y laminamos en vertical. Colocamos dos laminas en forma de cruz y en el centro una porción de carne. Cerramos las láminas sobre si mismas y vamos formando varios fardos así.

Trituramos y machacamos la albahaca y la incorporamos al aceite..
 Pelamos el plátano y con una mandolina vamos obteniendo finas rodajas. Calentamos a fuego fuerte aceite en una sartén y vamos friendo las rodajas hasta que queden crujientes. Las reservamos en una fuente con papel absorbente.

Ponemos una plancha al fuego con un chorrito de aceite, y cuando esté bien caliente colocamos los fardos de calabacín y los dejamos hacerse unos minutos por cada lado.

Colocamos en cada planto un par de fardos, un poco de plátano crujiente y decoramos con el aceite de albahaca

domingo, 18 de abril de 2010

Flan de Queso

Esta es una receta sencilla y que puedes hacer con los crios.

Vamos a necesitar: 4 huevos, ½ litro de nata de montar, 8 cucharadas de azúcar y 8 quesitos.

Ponemos 4 cucharadas de azúcar en una sartén hasta que se tueste, momento en el cual añadiremos un chorrito de agua. Dejamos que se vaya evaporando hasta obtener un caramelo. Dicho caramelo lo repartimos en el fondo de las flaneras.

Mezclamos en resto de ingredientes e introducimos la mezcla en los moldes. Los introducimos al baño María en una bandeja en el horno unos 20-30 minutos a 170º . Los pinchamos y cuando veamos que la aguja sale limpia los retiramos y dejamos enfriar fuera del horno. Si nos gustan fríos los metemos en la nevera unas 2h antes de servir.

Una vez enfriados desmoldamos sobre un plato y servimos.

Costillas de Cordero Lechal sobre torre de patata e hilos de queso y aceite de ajo.

Ingredientes: 
1 costillar de cordero. 6 patatas medianas. 150gr de queso semicurado. Mantequilla, leche, aceite, sal y nuez moscada. 

Limpiamos el costillar, sin separar las costillas, y la untamos de aceite. Sobre una sartén a fuego fuerte lo asamos unos pocos minutos por todas sus caras. Lo introducimos en un horno a 170º unos 15 minutos. Sacamos y reservamos la pieza. Reducimos el jugo de la sartén con vino blanco.  

Con las patatas hacemos un puré a base de leche, mantequilla, sal y nuez moscada (las cantidades a gusto de cada uno: Si se quiere un puré mas suave se añadirá nos 3 vasos de leche, si mas espeso 1½) . Rayamos el queso y reservamos.  Machacamos unos 4 dientes de ajo en un mortero y le añadimos un chorrito abundante de aceite. 

Antes de emplatar ponemos el jugo en una sartén para calentarlo. Cortamos el costillar en varios segmentos de una o dos costillas, y las colocamos junto al jugo para que tome calor. 

Ponemos la patata en unos aros para darle forma y encima el queso. Colocamos las costillas alrededor y napamos con su jugo. Decoramos en el aceite de ajo.

Nota: Como podréis ver en la foto, se me olvidó poner el jugo de la cocción sobre las costillas antes de empezar a comer. Se lo añadí a posteriori. Un fallo los tiene cualquiera...


domingo, 4 de abril de 2010

Verdinas con Almejas

Hoy una receta de cuchara muy apropiada para estas fechas tan pías.

Vamos a necesitar 500gr de verdinas, 3 zanahorias, 2 cebollas, 2 tomates y 100 gr de Almejas.
Tendremos las verdinas en remojo desde el día anterior.

Ponemos a cocerlas en un bol con agua hasta que las cubran completamente. Cocemos durante unos 15 minutos y desespumamos continuamente.
Pelamos las zanahorias, los tomates y las cebollas y las ponemos en el bol junto a las judías.
Dejamos cocer durante unas dos horas (si las hacemos con la olla exprés será menos tiempo). Vamos añadiendo agua a las verdinas conformen se vaya necesitando para que siempre estén cubiertas.

Pasadas las dos horas sacamos las verduras, algo de caldo y alguna verdina que se haya abierto y lo pasamos todo por la turmix. Rectificamos de sal y añadimos un chorrito de aceite.
Ponemos un bol pequeño con agua y llevamos a ebullición. Añadimos 5 almejas y dejamos cocer unos 10 segundos hasta que se abran, las sacamos y reservamos. Realizamos este procedimiento hasta que cocemos todas las almejas. Colamos el caldo de la cocción de las almejas y lo añadimos a las judías junto a las almejas.

Añadimos la mezcla de turmix y apagamos el fuego. Servimos.

sábado, 20 de marzo de 2010

Albóndigas a mi manera

Si hay una receta de la que nunca encontraréis dos iguales es la de las albóndigas. Cada cocinero tiene su propia versión de plato tan casero y creo que yo mismo nunca las he hecho dos veces del mismo modo.

La variaciones se basan tanto en el tipo de carne: ternera, cerdo o incluso de cordero;  como en los ingredientes: huevos, o pan rallado, o miga mojada en leche; o en las especias: yo nunca me acuerdo de una vez a otra las que uso, ya que abro el armario de las especias y echo mano de las que en ese mismo momento me parecen las mas adecuadas. Nunca las mismas.

Y en cuanto a la salsa con la que se acompañan las albóndigas otro tanto de lo mismo: mil opciones y mil variaciones: con cebolla, con puerros, con zanahoria, con tomate, con vino, etc.

Yo no me suelo complicar en cuanto al principal ingrediente, ni siquiera me dirijo al carnicero para pedirle ningún corte especial para picar. Mi supermercado me da la suficiente confianza como para elegir una de las bandejas de carne ya picada (no una de esas de carne “preparada” en la que añaden también especias).

Hoy la mezcla ha sido con pan rallado, ajo en polvo, salsa de soja, eneldo, sal y, como toque original he rallado un poco de parmesano y se lo he añadido al resultado final. Si no hago algo diferente no me siento cómodo. :-) 

Luego las bolas hechas con la mano se pasan por harina y se fríen en aceite caliente reservándolas.

En la misma cazuela de haber freído la carne se sofríe cebolla y zanahorias picadas y se desglasea con un baso de vino tinto. Sobre esa base hoy he añadido una lata de tomate triturado y la he dejado reducir. Luego la he pasado por la batidora y he añadido las albóndigas a la salsa.

El acompañamiento es sierre unas patatas fritas.

Nota aclaratoria. A mi mujer esta versión no ha sido la que mas le ha gustado de las que llevo hechas hasta el momento (la variación de la lata de tomate triturado no le ha parecido acertada), aunque a mi me han parecido muy sabrosas, pero he de reconocer su excesiva próximidad a unas albóndigas con tomate. De todas maneras os dejo a vosotros que la valoréis y en otra ocasión añadiré otra versión.

domingo, 14 de marzo de 2010

Guiso de Ternera con Risotto

No sé porqué (y agradecería si alguien me pudiese dar una explicación) pero las grandes creaciones, los platos muy elaborados y de gran originalidad, me gusta reservarlos para las celebraciones nocturnas, es decir las cenas.

Puesto que últimamente cada vez es mas complicado reunir comensales para las horas tardías de las cenas (cosas que tiene la paternidad), me he dado cuenta de que si preparo cualquier invitación para la hora de comer, y si además acepto a la chiquillería en casa, aseguro el lleno completo en la celebración.

Con estas dos premisas última invitación/celebración contó con 10 comensales sentados a la mesa que tuvimos que abrir en toda su extensión.

Como ya he comentado, también asistieron varios niños, así que por este motivo las posibilidades creativas quedaban ligeramente restringidas. Así que directamente me decidí por buscar una receta de plato único. Nada de una larga sucesión de pequeños platos.

Hacía tiempo que quería hacer una receta de guiso de ternera para mi familia, así que pensé que iría perfectamente para esta ocasión ya que no veía ninguna razón por la que no gustase a los críos y, si además en lugar del socorrido acompañamiento de patatas fritas, lo acompaño con un risotto de boletus, algo diferente se añade al plato.

Guiso de Ternera.

Ingredientes (tened en cuenta que la receta la hice para 10 comensales):
2kg. de ternera en tacos. 2 cebollas. 4 dientes de ajo. Pimentón. Perejil. Sal y Jugo de tomate (lo explicaré mas adelante).

Freímos a fuego fuerte los dados de ternera. Bajamos el fuego y añadimos cebolla picada fina, el ajo y el perejil. Sofreímos hasta que la cebolla se poche. Subimos el fuego y añadimos en pimentón y antes de que se nos queme echamos el caldo de los tomates. Dejamos cocer a fuego medio hasta que se reduzca por completo el caldo y tengamos una salsa melosa. Rectificamos de sal.

Nota aclaratoria: Desde que mi mujer dejó bien claro que le encantaba la pasta con tomate frito casero en lugar de tomate frito de lata, siempre tengo una provisión de latas de tomate entero pelado en la despensa. Pues dichos tomates para conservarse vienen en su jugo y, con ese afán ahorrador que debe caracterizar a todo buen amo de casa, con el paso de tiempo he ido encontrado varias recetas en las que poder usar dicho jugo.  Así que pensando en añadirle un caldo a la receta anterior se me ocurrió que sería buena idea añadirle este jugo que ya tenía reservado en la nevera.

Risotto de boletus.
Ingredientes:
Bolsa de boletus secos. Arroz. Nata. Queso parmesano.

Dejamos hidratar los boletus durante unas horas en abundate agua. Cocemos el arroz junto a los boletus y su agua. Y poco antes de servir lo calentamos en una sartén junto a un chorrito de nata y una cantidad abundante de parmesano.

Adjunto foto de cómo quedó el plato.


De postre la clásica tarta de cumpleaños de la que ya haré referencia en otra receta… :-)

domingo, 24 de enero de 2010

Tagliatelles con chipirones y langostinos

Cuando habalmos de recetas de pasta para los crios siempre hemos de echar mano de los socorridos spaghetti con tomate o de los macarrones con chorizo. Es dificil conseguir hacerles probar otras recetas como la pasta al pesto, a la carbonara o cualquier otra cuya salsa no sea la roja del tomate.



Hace tiempo di con una receta (cuando digo que di me refiero a que a estas alturas ya no me acuerdo de si la encontré en un libro o la cree a partir de varias ideas) que se sale de lo normal, que además lleva una salsa negra y que, sorprendentemente, les encanta a mis crios. La receta es muy sencilla: Sofreímos una cebolla picada fina y le añadimos una lata de salsa de tomate y un sobre de tinta de calamar. Reservamos. Hacemos trocitos unos chipirones y los pasamos levemente por la sartén. Pelamos y cortamos en trocitos varios langostinos cocidos y los pasamos por la plancha. Juntamos todo lo anterior para crear la salsa.
Cocemos la pasta y vertimos la salsa por encima.

Nota: Lo hemos acompañado con un vino blanco afrutado de Madrid que nos ha encantado: Alma de Valdeguerra.

lunes, 4 de enero de 2010

Cena de Nochevieja 2010

Finalmente ya fue la cena de nochevieja. Familia congregada entorno a la mesa y los mejores parabienes para el 2010.

Como era de esperar el menú de nochevieja sufrió modificaciones hasta justo la víspera. Los comentarios, entre atinados e interesados, de mí mujer hicieron que las opciones iniciales de entrantes se redujesen sólo a dos: Alcachofas fritas y chupa-chups de foie. Lo cierto es que el fin de semana anterior habíamos ido a “La Plaza”, mercado gastronómico urbano de Madrid, que en su edición de diciembre celebra su edición especial de navidad y donde nos proveímos de varios productos del cerdo ibérico (lomo, salchichón, chorizo, morcilla) así como de una selección de quesos. Todo esto propinó el comentario, este acertado, de que debía reducir la lista para así no cebar a los comensales ya en los entrantes.

Alcachofas fritas con salsa de mostaza y miel.
La receta la podéis encontrar en una entrada anterior del blog. La salsa con la que la acompañé en este caso fue de de mostaza y miel (me permitiréis que no divulgue aquí esta receta ya que se ha convertido, en cierta forma, en un secreto y alguno de los que esto leen llevan tiempo persiguiéndome para que se la revele).

Reconozco que este entrante puede parecer algo simple, pero su encanto se basa en este hecho y en la originalidad que le acompaña. El resultado debió gustar ya que fue el canapé que primero se terminó.

Bombón de foie recubierto de chocolate y envuelto en pipas de girasol.
La receta de chupa-chups inicialmente pensada sufrió cierta modificación: Al ir a buscar a la bodega el Jerez necesario para su elaboración (la llamo bodega en un intento de dotarla de distinción pero realmente es la parte del trastero donde guardo las botellas), encontré que no tenía, así que, puesto que no tenía sentido comprar una botella para usar sólo una pequeña cantidad para esta ocasión, decidí sustituirlo por una reducción del Sauternes (tampoco tenía pero este vino tiene gran aceptación en casa y rara vez no se gasta la botella una vez abierta). Pero si usaba este vino con el foie me quedaba sin el acompañamiento pensado, la gelatina. Buscando un sustituto se me ocurrió añadir una salsa de chocolate para así seguir en la línea de un acompañamiento dulce, y mejor que hacerlo en salsa usarlo como cobertura y así pasó de ser un chupa-chups a un bombón.


Crema bicolor con virutas de jamón ibérico y  pinchos de langostinos.
Uno de los comentarios de última hora de mi mujer fue relativo a la ausencia de un primer plato. Ella consideró que el inicialmente elegido, el crujiente de pato, no era adecuado y que habría que añadir algo mas identificable como tal. Ahora me tocaba ver qué poder hacer en tan poco tiempo. En anteriores ocasiones ya había preparado una crema de calabaza con naranja y otra de guisantes con lechugas, así que volvía a pensar en algún tipo de crema o sopa como sustituto.

Me gusta usar las legumbres en las estas cenas y sobre todo en presentaciones fuera de lo común. El año pasado hice un canapé de lentejas con crujiente de chorizo que tuvo gran éxito y en la cena de nochebuena también gustó mucho el de Mouse de garbanzos, así que me volvía a decantar por algo parecido, pero esta vez, para marcar la diferencia usaría una crema de lentejas al comino junto con una crema de coliflor. Unas virutas de jamón y un par de langostinos darían el justo toque crujiente al plato.


Carré de cordero lechal.
La verdad es que resulta impresionante ver el carré para 11 personas listo para meterlo en el horno. Previamente limpié las costillas y las tapé con papel de plata para que no se quemasen en el horno. Un chorro de aceite sobre la carne, cebolla cortada, un chorrito de vino blanco y directo al horno hasta que esté bien hecho. Unas patatas y zanahorias completaron el planto. El lechal de por si ya viste el plato y no hay que engalanarlo con nada mas.

Crema de mascarpone con sorpresa de marron glacé en base de galleta y crema de chocolate.
Otra modificación que tuve que hacer al menú, forzado por las circunstancias. La receta del flan de chocolate la tuve que usar para el postre de Navidad así que busqué otra opción para el postre. Queriendo hacer un postre ligero para así no terminar la velada con algo demasiado pesado, opté por la opción de la crema de queso, en este caso mascarpone, que es el que mejor combina en un postre. Como a mi mujer le encanta el marron glacé pensé hacer una crema con esa base para acompañar al mascarpone pero se hubiese convertido en una crema de nueces en lugar de un marron glacé. Así que lo que hice es triturar unos pocos, mezclarlos con unas hojas de gelatinas e introducir unas raciones dentro de cada una de las porciones de la crema de queso. Como acompañamiento unas grosellas, una mora y una crema de chocolate decorando el plato.

Caldos.
Con los entrantes brindamos con un Sauternes, Chateau Cantegril del 2006. Bien fresco y con el dulzor adecuado es un acompañamiento perfecto para el foie y no desentona con los embutidos y los quesos.
Para el menú abrimos un Ribera, a10, el vino de la bodega de Antonio Banderas y que sorprende por su seriedad, elegancia y adecuada expresión para una celebración como esta. Cierto es que no se encuentra entre los grandes caldos que podemos encontrar en el actual panorama vinícola español, pero no creo que sea esta su intención, mas bien la presentarse como opción muy válida dentro de la gama medio-alta.

El postre se acompaño con un Moscato D´Asti, G.D.Vajra. Un vino dulce de aguja italiano que al ser más fresco en boca que el moscatel español, acompaña mejor a los postres ya que no enmascara su sabor.

Para el final de fiesta, junto a las tradicionales doce uvas, tenía dos opciones: un cava, Berta Bouzy de Mont-Ferrant, que descubrimos hace poco en una cata y nos sorprendió porque, aun siendo un extra brut, no es nada astringente y tiene un paladar suave;  y como segunda opción un champagne, Pierre Moncuit, este recomendado por el somelier de mi tienda habitual y del que no puedo decir nada ya que apenas lo probé para brindar. Fue este último el que, por petición popular, abrimos finalmente.


Con todo esto terminamos el 2009 y empezamos el 2010 en tono gastronómico. Comiendo, bebiendo y disfrutando. Deseando a todos los lectores un muy feliz 2010 lleno de buenos sabores.