Las recetas que primero vienen a la cabeza en este tipo de situaciones son las de pasta ya que cocer la pasta y añadirle una salsa de tomate es una apuesta seguro para no tener problemas con los críos. Pero ese tipo de soluciones prefiero aplicarlas a las cenas, cuando menos tiempo se tiene para cualquier experimento.
Así que me ha tocado abrir la nevera y el congelador, y junto a mi mujer, decidir cuál sería el ingrediente principal y ver qué se podría hacer. En el congelador tenía unos trozos de ternera de una receta anterior, no en la cantidad suficiente para hacer un plato sólo de carne, así que la solución ha sido añadir unas patatas a la receta y algún ingrediente más que he encontrado.
250 gr. de ternera en trozos.
2 cebollas moradas50gr de chistorra
Una lata pequeña de pimientos asados.
100ml de vino tinto
6 patatas grandes
1 cucharadita de pulpa de pimientos choriceros.
Agua
Sal
Aceite
Elaboración:
Cortamos las cebollas y la chistorra en trozos bien pequeños y reservamos.
En una olla grande freímos la carne por tandas y la reservamos aparte. Echamos la cebolla en la olla y la dejamos que se poche momento en el cual añadimos la chistorra y dejamos que se fría. Añadimos las patatas peladas y cortadas en trozos bastos y la lata de pimientos asados cortados en trozos muy pequeños. Damos unas cuantas vueltas con una cuchara de madera e incluimos la pulpa de los pimientos choriceros.
Añadimos el vino y dejamos que se evapore el alcohol. Tras unos minutos vertemos la carne y añadimos la suficiente cantidad de agua para que cubra todo. Dejamos cocer entre 30-40 (hasta que pinchando las patatas no encontremos resistencia). Probamos y rectificamos de sal.
Dificultad: Fácil
Tiempo de preparación: 60min.
Coste: Mas de de 3€ el plato.
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